Octava Semana 8️⃣

 

Hoy vengo a contaros cómo fue mi octava semana de erasmus en Vendas Novas (Portugal).

El lunes fue un día tranquilo, he de decir que era necesario que fuese tranquilo ya que la semana pasada estuvo cargada de acción.


Eliseo y yo fuimos a la empresa y nos con la oficina vacía, ya que el jefe estaba trabajando desde casa. Sin embargo, como cualquier día que el jefe teletrabajaba, teníamos tarea por hacer. 

Después de una larga jornada de trabajo regresamos a casa, donde Anderson se le ocurrió que cocinásemos algo entre todos para cenar. Este fue el resultado:



Fue imposible para los 3 acabarnos toda la comida, por suerte tuvimos sobras para el día siguiente, así menos hay que cocinar jajaja.



El martes también fue algo tranquilo, en las prácticas Eliseo y yo tuvimos el taller con el jefe de prácticas para aprender más sobre las páginas web.

A la hora de comer fuimos a la casa a terminar la comida sobrante del día anterior y volver a la empresa a continuar con las FCTs. La tarde se puso más interesante cuando a nuestro jefe se le ocurrió hacer un tour en coche por Vendas Novas para terminar de descubrir los sitios que no conocíamos. 


Descubrimos una peluquería cerca de casa, lo que me recordaba que tenía que cortarme el pelo. Cuando terminamos la jornada Eliseo y yo nos fuimos a la casa, yo me preparé para salir a correr; al terminar la sesión de deporte me puse con el proyecto web que tenía que hacer durante las prácticas y ahi se me fue el resto de la tarde. El martes había llegado a su fin.


El miércoles fue un día más interesante. Al llegar a la empresa el jefe nos dijo que nos había enseñado todos los secretos de la empresa y que tocaba hacer lo mismo que hacía el.


Llegó el momento de trabajar bajo presión, había que entrar a una web y modificar unos textos. Yo estaba algo tenso porque cuando te dan las claves de una web sabes que no puedes hacerlo mal. Es cierto que ya había practicado con otras páginas menos importantes y que la tarea no era para nada enrevesada, pero tenía miedo de que apareciese en pantalla el mítico error 404.


Después de un rato haciendo el encargo del jefe llegó la hora de comer, en la casa yo preparé sopa con un paquete de sopa que me había traído mi madre el fin de semana anterior.



Al regresar a la empresa el jefe me dijo que la tarea no estaba del todo bien. Otro de sus empleados la había completado dándole otro enfoque; sin embargo me dijo también que no me desanimase, ya que me daría más oportunidades para hacer cosas de este tipo. 


De hecho me pidió que trabajase con imágenes. No es por presumir, pero se me daba bien trabajar con imágenes; durante el curso aprendí varios trucos de photoshop en la asignatura de diseño de interfaces web, además en el verano anterior me leí un manual entero que hablaba sobre el tratamiento de imágenes. Por lo que era una tarea asequible para mi.

Al terminar las prácticas los chicos y yo pensamos que sería buena idea ir a cenar a un restaurante italiano que nos había recomendado el jefe. 


Al llegar al bar lo primero que nos encontramos fue esta armadura, en cuanto nos quedamos embobados viéndola apareció una camarera que hablaba inglés mucho mejor que nosotros (Edu I'm sorry) y nos atendió. La comida no se demoró mucho y tenía una pinta increíble.



Sin embargo llegamos un poco justos de tiempo (En casi dos meses aún no nos habíamos acostumbrado a los horarios de los bares), así que se puede decir que cerramos el bar ya que a parte de nosotros solo había una mesa que parecía ser de unos familiares de los dueños del bar. Así que pagamos la cuenta y nos fuimos, pero antes de marcharnos nos hicimos esta foto:


Después de eso volvimos a casa y nos fuimos a dormir. El miércoles había llegado a su fin.



El jueves fue un día también interesante, teníamos videollamada con Edu y Juan, los profesores del instituto. Querían que hablásemos un poco con los chicos que están en el primer curso del grado medio de SMR y también con los chicos que están en el primer curso del grado superior DAW/DAM. 


Sin embargo la videollamada había que realizarla a las 2 de la tarde (1:00 en hora de Portugal), o lo que es lo mismo a la hora de comer. Por lo que Eliseo y yo nos llevamos comida para comer en la empresa; Anderson tenía un horario más amplio para comer, así que el no necesitaba llevarse comida a su empresa.

La mañana transcurrió de forma normal, el jefe me dio una nueva oportunidad para entrar a una web y observar cómo estaba todo, para posteriormente hacer unas modificaciones; eso sí esta vez tenía más instrucciones de cómo tenía que hacer la tarea.


Cuando llegó la 1 el jefe se marchó y nos dejó la oficina libre para hacer la videollamada. Durante el tiempo que duró la videollamada tuvimos algunos problemillas con internet, pero pese a ello pudimos comunicarnos con los profesores y alumnos.

Así los veíamos nosotros

Así nos veian los profes


Durante la llamada los compañeros nos preguntaron por cosas como si era difícil el idioma portugués, cuanto podía costar un café y cómo nos estábamos organizando en la casa en cuanto a cocinar y limpiar; entre los tres resolvimos las dudas muy amablemente y les dimos ánimos para que probasen esta experiencia el curso que viene.



Después de una pausa para comer tocó volver a la carga. El jefe regresó con más tareas de retoque de imágenes y de cambiar contenidos en páginas web. 

Al salir de las prácticas salí a correr un poco y después me centré en avanzar con el proyecto web.



Tras disfrutar de esta cena saludable, el jueves había llegado a su fin.


El viernes fue un día más activo. El jefe continuó mandándome tareas que parecían ser todo un reto. A diferencia de la primera vez, ahora sabía bien lo que me estaba pidiendo y estaba preparado para ello. Hasta la hora de comer todo fue bien.



Después de este plato de macarrones que me hice para comer todo empezó a ir mal. Tuve que ir más de una vez al servicio porque me habían sentado mal, no sin antes terminar un último encargo express del jefe. El resto de la tarde fue tranquila ya que el jefe nos dijo que esta tarde la jornada duraba una hora menos y que íbamos a ir al bar de la piscina.

La cerveza no era de Eliseo XD

En el bar de la piscina estaban celebrando una fiesta con música en directo, el jefe nos dijo que era porque iban a cerrar un par de días y que querían hacer algo antes. Los viernes parecían ser los días fuertes en Vendas Novas, porque siempre había más actividad ese día que los Sábados.



Después de un rato charlando y de un par de "cocacolas" el jefe sugirió que cenásemos allí. Eliseo y yo le dijimos que si. Además avisamos a Anderson para que viniera, pero no llego a tiempo de pedir comida porque acababan de cerrar la cocina. Sin embargo pudimos jugar a los dardos los 4 hasta que el bar cerrase. Esta vez no gané todas las partidas, se notaba que había perdido técnica.

El resto del día transcurrió de lo más tranquilo, los chicos y yo acordamos que al día siguiente visitaríamos Sintra.

El sábado tocaba hacer turismo, así que me desperté temprano y desayuné. Cuando iba a mi cuarto a vestirme me dijo Anderson que Eliseo se había quedado dormido y que no había manera de despertarlo, así que teníamos que ir los dos solos a Sintra.

Para ir a Sintra desde Vendas Novas era necesario cambiar de vía en Lisboa, esta vez teníamos que bajar en la estación de Sete Rios y no en Oriente como el resto de veces que viajé a Lisboa. Una vez allí con nuestra buena tarjeta de transporte pudimos comprar el billete que iba hacia Sintra.



Sintra es maravilloso. El jefe nos dijo que era como viajar a la serie Juego de Tronos, pero se quedó corto con esa descripción. Tras dar una vuelta en Tuk tuk con nuestro guía, Benedito, buscamos un sitio para comer y también degustar los típicos dulces de Sintra; el Traveseiro y la Qeijada. Ambos podían encontrarse en la pastelería llamada piriquita.





Después de comer estos dulces nos sentamos en esta plaza para disfrutar de las vistas. Se acercaba la hora de vuelta, por lo que emprendimos camino a la estación de tren; no sin antes observar que estaban de boda.


Al llegar a Vendas Novas Eliseo estaba fresco como una lechuga, seguramente se echó a dormir durante 10 horas y ahora estaba rebosante de energía. Después de cenar yo tuve una noche movidita. Resulta que me atasqué con el proyecto web y era incapaz de resolver el problema. 



Como el problema iba a continuar si o si decidí echarme a dormir. Creo que eran las 3 de la mañana cuando me eché a la cama e, traté de desconectar pero este fue el resultado:


Realmente me agobié con la situación ya que tenía que terminar el proyecto en los plazos fijados y esa noche parecía que nada estaba claro. Cuando conseguí dormir era ya casi el amanecer, las ocas del vecino me despertaron porque como ya era de día ellas no querían dormir más...



Un nuevo día lleno de errores por corregir en mi proyecto me esperaba. No se cuantas horas eché pero conseguí dar con la clave y resolví todos los problemas grandes. Los pequeños tuvieron que esperar a la semana siguiente.

Quitando esto el domingo no tuvo nada más de especial. La semana terminó así. Sin embargo a la siguiente semana vería a mis amigos, así que se venían cosas emocionantes.





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